Panza arriba: estado de bienestar que adoptaba la pequeñita Col muy a menudo.



jueves, 9 de junio de 2011

Fiesta

Entre todos los borrachuzos que ha dado la música en lo últimos treinta años, Shane McGowan se ha ganado un lugar de honor. Dicen que su amistad con el alcohol comenzo de niño, hasta convertirse posteriormente en una afición desmedida.
De este apego por la bebida cualquiera que haya asistido a uno de sus conciertos ha podido ser testigo. Como se aferraba a la botella desde el comienzo y no la soltaba, y llegado el momento resultaba hasta ininteligible lo que "cantaba".
A pesar de esto, aquel concierto de The Pogues al que asistimos hace ya  muchos años, resulto uno de esos momentos mágicos en los que cualquier chaval aficionado a la música disfruta, baila y se contagia de la atmósfera que llegaban a crear los, para mi, extraordinarios The Pogues. 

The Pogues han sido responsables de cambiar la forma de ver y oír la música folk, a través de una actitud punk, que ya reflejaba el primer nombre de la banda, Pogue Mahone (Bésame el culo), en 1982, gracias a esa actitud rebelde, a ese look políticamente no correcto de su cantante y sobre todo a sus canciones pegadizas salidas de la "lucidez musical" de Shane.

Desde 1984 hasta 1990 publican cinco discos, algunos brillantes: "Rum, Sodomy and the Lash" en 1985 producido por Elvis Costello, "If I Should Fall From Grace With God" en 1988. Hasta que en 1991 McGowan deja el grupo, obligado por sus problemas con la bebida y demás.
El genial Joe Strummer, que ya producía al grupo, se hace cargo de la voz, con un éxito relativo. 
Con dos nuevos trabajos de estudio, la banda dejó su actividad en 1996, mientras el desdentado McGowan creó The Popes.
A finales del año 2004, el grupo al completo, con Shane, regresa otra vez.

De su primer disco "Rum, Sodomy,..." es esta bonita canción


"If I Should Fall from Grace with God"  deshinibete y no pares de saltar.

The Pogues logra su mayor éxito comercial con el single Fairytale of New York, que interpretan junto a Kirsty MacColl. Una canción de navidad incluida también en el disco de 1988. 

Estas canciones me traen buenos recuerdos, muy buenos.

Col.

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