Panza arriba: estado de bienestar que adoptaba la pequeñita Col muy a menudo.



domingo, 1 de abril de 2012

Siempre

El 5 de Mayo de 1995, con la bolsa preparada y mi amigo Jonan esperando para salir, recibí la mala noticia. Una llamada de telefono de una compañera del trabajo me la dio.

Desde que editaron su primer disco en 1989, los Stone Roses se convirtieron, por que no decirlo así, en un grupo de culto para mí. She bangs the drums, I wanna be adored, Sally Cinamonn y tantas otras, eran canciones que no dejaba de escuchar y que me acompañaban a todos los sitios. De una forma  casi obsesiva.
Jonan y yo esperabamos impacientes la fecha en la que estos anunciasen los días y los lugares de la gira. Yo estaba dispuesto a desplazarme haya donde hiciese falta, Ain't no Mountain High Enough...que no estuviese dispuesto a subir para ello.
Y se anunció, un único concierto en España, el 7 de Mayo de 1995, en la sala Aqualung de Madrid. Perfecto. Nos vamos!

A Jose Mari, los Stone Roses no le decian nada. Me oía hablar de ellos casi a diario en el trabajo, me sufría y se sorprendía de mi absurdo "enamoramiento". No entendia mi compañero, como un grupo, como la música, podía abducirme de esa forma.  
Un fin de semana, esperando que por fin me entendiese, me trabajé una artesanal "Very best of" del grupo, que emocionado le regalé. Pero ni con esas.
Coincidiamos en mucho, pero estaba visto que en música no.

Es curioso, como a partir de ese fatídico día 5 de Mayo, este extraordinario grupo de música nos sirve a Jose Mari y a mi, a día de hoy, como un sorprendente y extraordinario nexo de únion.
Desde ese día no he vuelto a verle fisicamente. Pero los Stone me hacen tenerlo presente, siempre. La amistad, dicen, no entiende de limitaciones.

Diecisiete años despues, el próximo 9 de Junio, Jonan y ahora yo también, vamos por fin a verlos. Tocan los Stone Roses en Barcelona y a pesar de que nuestro enamoramiento se enfrió un poco debido a los años, me faltó tiempo para "lanzarme" a comprar las entradas.
Ayer sabado, en mi salida montañera, recuperé y sono ese "Very best of" que con tanto cariño le grabé a Jose Mari. 
Resultó un día especial. Como supongo que también lo será el día del concierto.


I am the resurrection.

4 comentarios:

  1. Escucha (listen) hey - aló:

    Cuando me enteraste de que habíamos entradas para el espectáculo Roses (Stones), dí tal voltereta de alegría que aún no he caído a tierra.

    Por lo que leo en prensa, me puedo mantener up in the air, no parece que mi presencia sea reclamada en ningún país.

    Bien.

    Saluts

    Jackson

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  2. Guarda unas cuantas piruetas y cabriolas para el concierto.
    John Squire va alucinar viendo a uno de sus fans levitando On the Sohw.

    Ya falta menos.

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  3. Aquí otro admirador (en su momento bastante pesado al respecto) de los Stone Roses. Tengo un par de vinilos, y cada vez que vuelvo a escucharlos, sigo experimentando ese pinchazo tan particular que me produjeron desde el principio. Amor a primera "vista"!!!!

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    Respuestas
    1. Lo mío también se puede llamar amor a primera oída.
      Los vinilos (que tiempos!) de esta gente los guardo como oro en paño. Me hicieron pasar tan buenos momentos!
      Tenemos autenticas ganas de verlos en directo.
      Ya te contaré.

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